El nuevo PGOU de Alcalá de Guadaíra prevé dotaciones de menor y mayor rango que den servicio a un barrio concreto, a una ciudad, así como al área metropolitana.

Este planeamiento proporcionará servicios al ciudadano en zonas como la Plataforma Logística, el Parque del Corredor Industrial, el Parque Tecnológico, o al norte de la A-376. Entre estas dotaciones destaca la ampliación de las instalaciones de la Universidad Pablo de Olavide; el intercambiador del Zacatín; un hospital o la estación del metro, entre otras.

El nuevo PGOU entiende que los pilares del sistema de equipamientos serán el ocio, la práctica deportiva, las actividades culturales y los servicios asistenciales tales como los sanitarios y administrativos.

Encabezando esta idea destaca 'la Ciudad de la Cultura', concepto por el que se conoce la integración urbanística de las laderas del castillo en la vanguardia de la cultura: la gran biblioteca y el nuevo teatro.

Dos construcciones ideadas por el famoso arquitecto César Portela que son una realidad. Junto a éstos destaca la rehabilitación del Castillo para su conservación y puesta en valor que viene acompañado de todo un proyecto de turismo, Riberas del Guadaíra. Éste aglutina las señas de identidad más características de la ciudad: el castillo, el río, los molinos harineros, y las riberas para el uso y disfrute de la población no sólo local, sino también metropolitana, desde el punto de vista de la sostenibilidad. Muestra de ello es el el Centro para la Educación del Turismo Sostenible.

El potencial medioambiental de Alcalá tiene mucho que decir para el ciudadano: 150 hectáreas de parques de ribera y 30 kilómetros de caminos naturales por donde pasear o hacer deporte se unen a este entorno cultural.

Seguimos sumando opciones y  ahí están las mejoras de los distintos complejos deportivos por las barriadas ideados para el deporte en familia y las relaciones intergeneracionales; las nuevas dotaciones sociales como los distritos y sus respuestas para asociaciones no gubernamentales, vecinales o juveniles; la nueva Comisaría de Policía Nacional, el nuevo Centro de Salud, el Centro de Formación San Francisco de Paula, el nuevo mercado comercial, el Museo de la Ciudad, etc.

Todos estos proyectos están en marcha y son una realidad constatable por los ciudadanos que harán de ellos, cuando su funcionamiento esté al cien por cien, un hábito de uso indispensable, al igual que lo han hecho con los nuevos espacios comerciales y de ocio con los que hace apenas seis años Alcalá no contaba.

Dichas dotaciones de carácter metropolitano para la cultura o el deporte, se unen con los servicios más pequeños pero necesarios de cada barrio y forman un cúmulo que hace que vivir en Alcalá le ofrezca al ciudadano un valor añadido respecto a otras ciudades.