El Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra ha reducido el periodo medio de pago a empresas y proveedores al nivel más bajo de su historia desde que se mide esta magnitud fiscal y lo ha situado en 19,12 días. Esta cifra es un claro indicativo de la salud económica y financiera del Ayuntamiento y tiene efectos beneficiosos tanto para los proveedores como para el conjunto de  los ciudadanos.

Para las empresas y pymes supone una inyección de liquidez, especialmente útil en la situación actual de ralentización de la economía. Para el conjunto de los alcalareños supone una  mayor disponibilidad de recursos por parte del Ayuntamiento para inversiones y políticas sociales, ya que la situación saneada de las arcas municipales permite reducir los costes de financiación y por tanto disponer de más recursos con los que atender las necesidades de los ciudadanos.

La reducción del periodo medio de pago a proveedores uno de los objetivos fijados por el Equipo de Gobierno para mejorar la gestión municipal. De esta forma, en el segundo trimestre de 2020 el periodo medio de pago del Ayuntamiento alcalareño se situó en 25,65 días. Ahora vuelve a bajar, hasta los 19,12 días. Esto supone una notable mejora respecto a los años anteriores. En el segundo trimestre de 2019 era de 64,79 días. En esa misma fecha en 2018 se sitúo en 97,95 días, mientras que en 2017 fue de 89,41 días.

La cifra alcanzada evidencia que a pesar de la complicada situación por la que atravesamos debido al covid-19, la administración local no se ha paralizado, sino que ha mejorado su funcionamiento. En el tercer trimestre de 2020 el Ayuntamiento ha pagado facturas por valor de de 3.673.000 millones de euros a proveedores.

El periodo medio de pago es uno de los cuatro criterios cuyo cumplimiento pide el Ministerio de Hacienda a los ayuntamientos. En el caso de Alcalá también se cumple con los otros tres: no se supera el límite de deuda, al lograr una notable reducción de dicha deuda que ha pasado de 85 millones en 2012, a 19 millones al cierre de 2019; el ayuntamiento tiene superávit presupuestario y se cumple la regla de gasto de 2019.